lunes, 2 de mayo de 2016

FLANDES II: GANTE Y AMBERES



En la primera parte de nuestro acercamiento a Flandes visitamos las maravillosas ciudades de Bruselas y Brujas, en esta segunda parte trataremos de mostraros la belleza de otros dos destinos imprescindibles en nuestra visita a esta región belga: Gante y Amberes.

Desde Brujas, solo 50 kilómetros o 45 minutos en coche nos separan de Gante. Estamos hablando de una de las ciudades históricamente más importantes de Europa en la Edad Media y eso se refleja en la gran cantidad de monumentos y edificios históricos que alberga. Además es una ciudad muy animada y alegre, que sumado a la gran cantidad de zonas peatonales de su centro histórico, lo hacen un destino perfecto para disfrutar del turismo.

Aunque parece que Gante siempre está un poco a la sombra de Brujas, lo cierto es que, aunque esta pueda parecernos más bonita y encantadora, Gante es más espectacular y tiene más cosas que ofrecernos.


Llegar en coche a Gante desde Brujas es muy sencillo por la autopista… otra cosa muy distinta es aparcarlo. En el centro es imposible a menos que sea en un parking o en zona azul. Una buena opción dejarlo en la zona de la Universidad y llegar al centro en una caminata de sólo diez minutos.

Si optamos por esta alternativa, el primer edificio que nos llamará la atención, junto a un canal, es el castillo de Gerardo el Diablo (Geeraard de Duivelsteen) el menos conocido de los dos castillos de Gante. Data del siglo 13 y hoy en día es el Archivo del Estado.






En seguida nos toparemos con la impresionante Catedral de San Bavón, justo detrás del castillo. Se trata de un grandioso edificio gótico finalizado a mediados del siglo 16, en el que destaca la gran torre de 90 metros de altura. El resto de la fachada es bastante sencilla. El interior guarda obras escultóricas de gran belleza, pero sobre todo los turistas venimos a ella para contemplar una de las obras más importantes de la pintura flamenca, El cordero místico de Jan y Hubert van Eyck, situado en una capilla al fondo de la cripta. La catedral abre de 8:00 a 18:00 horas (en invierno hasta las 17:00 horas).






Frente a la fachada de la Catedral se encuentra la preciosa plaza Sint-Baafsplein. En este momento empezamos a enamorarnos de esta ciudad por regalarnos a la vista rincones como el que tenemos ante nosotros. En esta plaza, además del edificio de la Catedral, destaca el teatro (a la derecha de la misma) y justo en frente, el campanario o Belfort de Gante. Dicen que es el más alto del mundo con 91 metros.  Obviamente las vistas desde lo alto son increíbles. A los pies de la torre el edificio que veréis es la Lonja del Paño (la industria textil hizo de esta ciudad una de las más ricas en la Edad Media).






Justo detrás de la lonja se abre otra plaza, Emile Braunplein. En el centro un edificio de reciente construcción y, en mi opinión, de dudoso gusto, el Stadshal. Un recinto multiusos que desluce mucho esta bonita plaza y que no guarda ninguna armonía con el entorno. Pero ya digo que es cuestión de gustos. Junto a esta plaza encontraremos el precioso ayuntamiento en el que nos llamará la atención su fachada con una parte de estilo gótico soberbio y otra parte mucho más sencilla, ya que los ingresos menguaron bastante y hubo que optar por un aspecto más sobrio.







Volvemos a la plaza para encontrarnos con otro de los grandes monumentos de Gante y de los más antiguos, la iglesia de San Nicolás. Su construcción se inició a principios del siglo 13 en estilo gótico sustituyendo a una anterior iglesia románica. Destaca su torre, que junto con las dos mencionadas anteriormente conforman ese típico skyline de Gante.





Unos pasos más adelante y nos topamos con el río Lys que cruza la ciudad. Desde el puente de San Miguel, mirando hacia nuestra derecha, se dibuja una de las estampas más típicas de esta preciosa ciudad. Los típicos muelles de Graslei a un lado y Korenlei al otro lado y la figura del castillo de Gravensteen al fondo. Sin duda esta es una de las zonas con más encanto de Gante. De día e incluso más por la noche. Antes de bajar, desde el puente, un vistazo hacia atrás nos dejará con la boca abierta.





Bajamos a la zona de los muelles, a lo que en su día fue un activo puerto. En la zona de Korenlei admiraremos edificios barrocos, renacentistas y góticos donde se vendía grano para las cervezas. Y en el sector de Graslei, para mi gusto más auténtica y encantadora, encontraremos otros edificios como la casa de los Masones, la casa de medición de granos o el Granero reconocibles aún por los escudos de sus fachadas. Hoy en día estos edificios son refugio de restaurantes y bares reclamo de turistas y estudiantes. Es muy recomendable dirigirse a esta zona cuando cae la noche, no sólo por la cantidad de imágenes que querremos inmortalizar con nuestra cámara de fotos, si no sobre todo para disfrutar del magnífico ambiente y la animación de esta ciudad. Ofertas para pasarlo bien, no nos van a faltar.






 
a pocos pasos de aquí se encuentra el Castillo de Gravensteen o Castillo de los Condes, que fue erigido en 1180 y que vio nacer en el año 1500 nada más y nada menos que Carlos V, el emperador del mundo. Posteriormente también fue casa de la moneda, molino y prisión. Se puede visitar (de 10 a 18 todos los días en temporada de verano, y de 9 a 17 en invierno) abonando previamente los 10 euros de la entrada. En su interior encontraremos salas en las que se exponen armas, armaduras, instrumentos de tortura… y ese tipo de cosas. Lo mejor, las vistas desde sus torres.





Justo enfrente de la entrada al castillo se ubica la Oficina de Turismo, que además de visitar para recabar información, merece la pena sólo por su fachada.





Desde aquí tomando la ribera del río Lys, desembocaremos en una de las zonas más típicas y atractivas de Gante, el barrio medieval de Patershol. De calles estrechas y adoquinadas, casas pequeñas… la tenue luz de la iluminación nocturna, lo hace aún más auténtico. Un buen lugar para cenar en la multitud de restaurantes de todo tipo que encontraremos paseando por estas callejuelas.



Para terminar nuestra visita a Gante, y deleite de los más consumistas, podemos recorrer la calle más comercial de la cuidad, Veldstraat, que parte de la Iglesia de San Nicolás.

Habiendo gozado de esta ciudad como seguro que hemos hecho, recuperamos nuestro coche y tomamos rumbo suroeste para visitar el espectacular Castillo de Ooidonk. El emplazamiento, la elegante arquitectura del edificio y la tranquilidad del entorno justifican el recorrer los 16 km que lo separan de Gante. Se pueden visitar únicamente sus jardines de miércoles a domingo de 9:30 a 18 y el precio de la entrada es de dos euros. Si quieres visitar también el interior y descubrir una mansión renancentista, sólo podrás hacerlo los domingos y festivos de 14 a 17:30 (9 €). Aunque en mi caso no pudimos ver el interior, sí recomendaría una detenida y relajada visita por sus jardines, del estilo de los que visitamos en el Loira en nuestra primera entrada de este blog, que por supuesto os recomiendo visitar…
 

 












AMBERES

40 minutos en coche nos separan de Amberes, ciudad de tradición marinera, ahora asociada al mundo de la moda, el diseño y los diamantes. Una buena zona para aparcar nuestro vehículo sería en la calle que discurre paralela al río Escalda, lo más cerca posible del castillo de Amberes, llamado Het Steen.









Dicho castillo puede ser un buen comienzo de nuestra visita por esta ciudad. Al acceder al él, lo primero nos toparemos con la estatua de un gigante, se dice que en la Edad Media cobraba un peaje a todos los visitantes que quisieran entrar en la ciudad. Se trata del edificio más antiguo de Amberes y arquitectónicamente muy interesante, a pesar de los añadidos que ha ido sufriendo con el tiempo. Ha sido prisión, almacén, residencia y hasta escuela de teatro. Podemos visitar su interior casi todo el año de martes a domingo. Además desde esta ubicación, podemos disfrutar de una bonita panorámica de la ciudad.








Si caminamos en dirección opuesta al río, en cinco minutos nos vamos a plantar en la preciosa plaza de Grote Markt. Como otras de las plazas principales que hemos visto en otras ciudades de Flandes, en esta Plaza en ella encontramos el Ayuntamiento (impresionante edificio renacentista), los edificios gremiales (con las típicas fachadas en escalón y rematadas con alguna figura que nos indicará a qué gremio pertenecía) y en el centro la estatua del gigante Antigón (otra historia de un gigante que controlaba el paso a la ciudad y que cortaba la mano a los que no pagaban el peaje. Si nos fijamos es lo que representa la figura).





Desde la plaza contemplamos también la estilizada silueta de la Catedral de Nuestra Señora y su torre. Si nos acercamos a ella, comprobaremos la magnitud del edificio de estilo gótico (de hecho es la más grande de Bélgica, una demostración del dinero que se movía aquí en la Edad Media). En el interior nos impresionarán sus dimensiones, sobre todo en la nave principal, aunque muchos turistas la visitan para contemplar algunos de los cuadros más importantes de Rubens.





Y si las pinturas de Rubens nos han dejado huella, dejando atrás la Catedral podemos acercarnos a visitar su casa-taller, situada en la Plaza Wapper. El palacio, del estilo de los palacios renacentistas italianos, representa muy bien como era la vida en ese estudio y comprobaremos como algunas veces no era el artista el que pintaba el cuadro, sino que lo diseñaba y daba órdenes de cómo debía ejecutarse.

Por suerte para nuestro perro, Amberes es una ciudad llena de parques y espacios verdes donde disfrutar de agradables paseos. En este lado del río, cerca del centro histórico, os recomendamos el parque llamado Stadspark repleto de intrincados senderos. Y en el otro margen del río Blokkersdijk, para paseos muy largos.

Y con esta visita a Amberes, finalizamos esta doble entrega por tierras de Flandes. Con tiempo podríamos incluir en nuestra visita, ciudades igualmente atractivas como Malinas o Lovaina. Espero que este recorrido por las cuatro ciudades más conocidas de Flandes haya sido de vuestro agrado. Cualquier comentario que queráis dejar en esta página siempre será bienvenido.